Gregorio García Latorre

La lucha de los trabajadores de Roca Maroc nos devuelve a tiempos de enormes dificultades para la actuación sindical por la carencia de derechos laborales y políticos, tiempos en los que, también, frente a esas dificultades, se alzaba una voluntad colectiva mucho más firme y decidida. Nuestra situación es distinta: ganamos formalmente derechos dejándonos arrebatar voluntad colectiva, perdimos la partida. No caben nostalgias, cabe la solidaridad activa ejercida por los compañeros de CGT Roca de Gavá, demostrando que la solidaridad es la argamasa con la que levantar el sindicalismo.

Este pasado mayo se cumplió un año desde que, a través de la secretaria de relaciones internacionales, nos llegó a la sección sindical de CGT-Roca una llamada de solidaridad y ayuda desde un grupo de trabajadores de la fábrica de Roca Sanitarios en Settat (Marruecos). Este grupo de trabajadores se había organizado en torno al sindicato Marroquí UMT  y ya contaban con más de 300 trabajadores afiliados. Nos pedían ayuda ante el hecho de que la empresa Roca no quería reconocerles como sección sindical, impidiendo así el derecho a convocar elecciones y formar un comité de empresa que les permitiera mejorar sus lamentables condiciones de trabajo.

DERECHOS Y CONDICIONES LABORALES EN ROCA MAROC

CGT-Roca de Gavà iniciamos una campaña de denuncia a través del envío masivo de mails y faxes a la dirección de la corporación Roca, a embajadas y autoridades españolas y marroquís. El efecto fue inmediato y la empresa accedió a reunirse con los compañeros en Marruecos. Posteriormente nos invitaron a su asamblea de constitución –la sección sindical era reconocida por el Gobierno de Marruecos, pero no por la empresa- y el 24 de junio viajamos dos compañeros de CGT- Roca para establecer un acuerdo de colaboración y ver más de cerca la situación de acoso y persecución que sufrían. El viaje fue muy enriquecedor en cuanto a experiencia en solidaridad y colaboración entre dos culturas no tan diferentes y un mismo objetivo como clase trabajadora. En esos días de reuniones y asamblea establecimos objetivos comunes, centrándonos sobretodo en lo que nos unía, fijando un plan de trabajo para consolidar su lucha sindical en Roca Maroc e iniciar contacto con los trabajadores de Roca Gravena en Egipto.

 En las reuniones los compañeros y trabajadores nos explicaron situaciones como las resumidas a continuación.

– Los despidos se producen sin preaviso ni indemnización aunque la ley de Marruecos sí lo establece, siendo habituales las trampas a trabajadores para argumentar un despido objetivo, como habían hecho recientemente con un miembro del de la Sección Sindical.

-En el caso de que un trabajador falte, obligan al del turno anterior a trabajar ocho horas más y seguir al día siguiente su turno habitual. Si el trabajador se niega, la sanción o el despido es el siguiente paso por parte de la empresa.

-Es el médico de la empresa, que en la mayoría de los casos es a la vez el de cabecera, quien decide los días de baja, sancionando la falta al trabajo con falta muy grave o despido.
-Hace aproximadamente siete meses murió un compañero que, al sentirse muy mal en el trabajo, fue trasladado al dispensario en una carretilla de carga y, ante la gravedad, llevado al hospital, dejándolo allí sin acompañamiento. El hospital le dio alta el mismo día, muriendo en su casa. La empresa no se hizo cargo de nada ni reconoció ninguna responsabilidad.
-Si un trabajador se indispone le apartan a un rincón de la fábrica en un carro de trasladar inodoros para que se le pase, sin prestarle ninguna asistencia médica (nos enseñaron fotos)

-Días antes de nuestra visita uno de los compañeros que está encabezado la organización del sindicato en Roca-Maroc sufrió una agresión por parte de dos individuos desconocidos que le amenazaron para que cesara en su actividad sindical

CAMPAÑA DE DENUNCIA Y APOYO

Al volver a Gavá lo primero que hicimos fue pedir una reunión con el Sr. Xavier Aguilera, Jefe de Recursos Humanos de toda la corporación Roca a nivel internacional, y otra al comité de empresa de Roca-Gavà y las secciones sindicales que las componen (CCOO, UGT y CGT), pero la respuesta por parte de CCOO y UGT fue «que no era necesario» y ninguna respuesta recibimos por parte del jefe de RRHH. Ya nos esperábamos la actitud de la empresa pero no entendíamos la pasividad de CCOO y UGT ante un tema tan grave que afectaba a compañeros que quieren mejorar sus condiciones laborales.

Ante esta actitud CGT-Roca aprovechamos la reunión de informe económico anual de Roca-Gavà, que tuvo lugar el 12 de septiembre, para denunciar la situación de explotación, acoso, represión y persecución sindical contra los trabajadores de Roca-Maroc. Cuando nos concedieron el turno de palabra expusimos toda la situación y los casos de explotación y represión que sufren. La respuesta por parte del Jefe de RRHH fue (después de quince segundos de silencio y cara de póquer) «que ellos respetaban las leyes de aquellos países donde operaban», a lo que le dijimos que eso, al menos en el caso de Marruecos, no estaba siendo así, contestándosenos que «este no es lugar donde exponer este tema». Esta respuesta por parte de la Dirección muestra que son totalmente conscientes y responsables de la grave situación que viven los compañeros en Roca-Maroc. Más sorprendente resulta el silencio guardado por parte de los 12 delegados de CCOO y UGT que asistieron en la misma reunión.

 La respuesta de la empresa familiar Roca no es sorprendente, esos métodos y actitud con sus trabajadores cuando deciden organizarse para mejorar no son nuevos. En Gava y Viladecans tenemos la experiencia. Muchas veces hemos oído a ex trabajadores de Roca, las condiciones en que trabajaban y cómo en las huelgas, la empresa, con sicarios de la extrema derecha y con la Guardia Civil, reprimía y amenazaba a los trabajadores que participaban en las luchas de los años 70. (Consultar libro “La vaga de la Roca 1976-1977, una generació despres”). Los compañeros de Roca-Maroc están actualmente en un contexto político y social muy similar al de nuestros padres y abuelos en los 70, quieren hacer valer los mínimos derechos sindicales y laborales para seguir mejorando, y es Roca, una empresa familiar catalana, la que se los niega con sus tradicionales métodos.

 Mientras en CGT-Roca seguíamos con la campaña de denuncia de su situación, los compañeros de Roca Maroc, que seguían intentando presionar tanto a la empresa como a su gobierno, se encontraron con que el responsable sindical de la UMT que se encargaba de su lucha no solo no se implicaba sino que demoraba las acciones, por lo que los compañeros marroquís, ante la sospechosa pasividad, no perdieron el tiempo y se cambiaron al sindicato CDT. Más tarde nos contarían que tenían la sospecha que había sido “untado” por la empresa.

 REPRESIÓN Y HUELGA INDEFINIDA

Este hecho no varió en absoluto su trabajo que -con el apoyo de cartas, mails y faxes a embajadas, prensa, jefes de dirección de Roca y gobierno Marroquí- comenzó a dar resultados, sentando a las partes en diferentes reuniones en la Autoridad Laboral de Settat. Teníamos claro que lo importante no era lo que saliera de esas reuniones sino que los compañeros vieran que con la presión de la campaña internacional y su lucha podían conseguirse resultados. Los compañeros en cada reunión convocaban concentraciones frente al lugar donde se celebraban, y eso incomodaba a la empresa, a la vez que presionaba mucho al mediador del Gobierno Marroquí.

 La estrategia de la empresa era sin duda dilatar la situación, pero al ver que el mediador se posicionaba con los trabajadores y que estos en su posición de fuerza decidieron no hacer más horas extras, recurrió a sus tradicionales métodos, despidiendo a los dos compañeros que constituyeron la sección sindical: Nachit Elbashir, Secretario General y Azzdine Bousajda, Secretario de Organización.

 La reacción de los trabajadores fue inmediata, el mismo día 2 de Noviembre que se producen los despidos se plantan en huelga indefinida y se organiza un piquete las 24 horas frente a las puertas de fábrica.

 Nuestro contacto con los compañeros marroquís era constante e intentábamos aconsejarles en métodos de lucha, pues, a pesar de que su sindicato la CDT ya les orientaba en algunos aspectos, veíamos que frente a una Huelga indefinida había que abordar actuaciones más allá del piquete en la puerta.

 La empresa al ver que contaban con más del 90% de apoyo en la plantilla y que la huelga no era un farol sino que los trabajadores iban en serio, no tardó en enseñar una vez más su verdadero rostro y, a la semana de huelga, envió cartas a los más de 400 trabajadores que la secundaban, comunicándoles que la no incorporación al trabajo suponía una falta grave que acarreaba despido.

El 14 de Noviembre, la empresa comunicó a la delegación de trabajo marroquí su intención de despedir a todos los trabajadores en huelga y sustituirlos por otros, también les amenazó con llevarse la producción a sus plantas de Portugal y, además,  organizó a los comerciales  como esquiroles, pero, evidentemente, no fueron suficientes para poner en marcha el proceso productivo.

Todo eso  lejos de amedrentar a los trabajadores, hizo que dieran un paso más en su lucha y decidieran bloquear el acceso y la salida de cualquier camión que estuviese fuera o dentro de la factoría.

Ante esta posición de fuerza, los compañeros nos contaban que se había ofrecido dinero a trabajadores y sindicalistas para que abandonasen la huelga y así romper la unidad, la fuerza y  la lucha. Esa actitud les reafirmaba en su decisión de seguir con la huelga.

Merece destacarse que el inicio de la lucha en Roca Marruecos coincide con un ERE temporal presentado por la empresa, con el que pretendía reducir la plantilla. Simultáneamente Roca Maroc incrementó la producción, obligando a la plantilla a trabajar de lunes a domingo, como había hecho en anteriores EREs. Pero en esta ocasión los trabajadores marroquís, ya más organizados, se negaron y eso precipitó el despido de los dos compañeros que dio origen a la huelga

 Mientras, CGT-Roca convocábamos piquete en las puertas de oficinas centrales de Barcelona, exigiendo la readmisión y denunciando la represión sindical.

 El día 2 de Diciembre justo cuando se cumplía un mes del inicio de la huelga –mientras en las puertas de Oficinas Centrales de Roca Corporación en Barcelona la sección de CGT de Roca hacia un piquete solidario con la huelga en Roca Maroc, bloqueando la entrada y salida de los directivos- los compañeros del piquete de Roca Maroc, sufrieron un grave ataque por parte de un esquirol: el traidor se abalanzó con su vehículo sobre los trabajadores que permanecían en el piquete de la entrada, atropellando a uno de ellos, se bajó de su vehículo con un cuchillo con el que agredió a otro trabajador produciéndole un corte profundo  en mano y ojo izquierdo y se subió de inmediato al coche introduciéndose dentro de la empresa Roca, donde sorprendentemente, o no tan sorprendentemente, se le dio cobijo. Los compañeros agredidos fueron hospitalizados.

La lucha de los compañeros estaba siendo un ejemplo en todo el polígono industrial de Settat y la fábrica textil “TAVEX Algodonera”, que trabaja para la marca “Diesel”,  y otra empresa de nombre “Kotoubia”, ambas de capital extranjero también se pusieron en huelga y se estaban organizando para mejorar sus condiciones de trabajo y reclamar sus derechos laborales y sindicales.

 En esta situación la autoridades de Marruecos estaban muy presionadas por la inversión extranjera para que frenase este auge de lucha en Settat, una fotógrafa documental que estaba haciendo un reportaje sobre la huelga  fue “invitada” a cesar en su trabajo y a abandonar la zona, y la policía, tras la agresión del esquirol, hizo responsables a los trabajadores de lo que sucediera a partir de ese momento. Esta actitud de las autoridades marroquís, similar por otra parte a la de cualquier gobierno, hacía más importante el apoyo y sobre todo la difusión por todos los medios posibles de la lucha de los compañeros de Roca Maroc.

Después de más de 40 días de huelga había un desgaste por parte de los trabajadores y despedidos, más por la falta de ingresos en sus hogares que por las amenazas de la empresa y la policía del gobierno. Había trabajadores con avisos de desahucio y otros con la mujer e hijos en  casas de familiares.

Desde CGT-Roca iniciamos una colecta de fondos económicos para una caja de resistencia, esto formaba parte de los métodos que desde aquí intentábamos aplicaran. Se les enviaron 1500€,  insistiendo en adminístralos en alimentos básicos y ayuda económica a los más necesitados, todo bajo el control de la asamblea.

Estaban en situación límite, y CGT-Roca y CGT Internacional valoramos que sería positivo que viajásemos hasta Settat para levantarles la moral y también presionar a Roca, haciéndoles ver que no estaban solos y que la lucha seguía con fuerza.

El 16 de Diciembre viajamos hasta Settat, comprobando que los compañeros despedidos se sentían muy presionados con la situación y que algunos trabajadores en huelga estaban en una situación límite. Nos contaron que ellos y su sindicato CDT estaban manteniendo reuniones con la empresa para llegar a un acuerdo, pero que de momento no había nada, y que cualquier acuerdo pasaría por la asamblea.

Les acompañamos en los piquetes y entre cánticos y consignas, bloqueando las puertas de la fábrica, conseguimos parar y obligar a hablar con nosotros al director general en Roca Maroc, y al jefe de producción, éste nos dijo que quería hablar pero que mejor hacerlo separados de los trabajadores, a lo que le contestamos, que nosotros hablábamos en nombre de los trabajadores y que ellos debían escuchar lo que ahí se dijera. La charla fue intensa y muy acalorada, con decenas de trabajadores rodeándolo. Era la primera vez que el piquete podía dirigirse a un jefe y eso les dio fuerza. Las mentiras y el desprecio que el director general, Xavier Rodrigo, mostró a todos en la conversación, su actitud y sus gestos, no hicieron más que encender los ánimos.

También les hicimos entrega de 500€, aportación de la CGT de Andalucía a la  “caja de resistencia”.

 De allí salimos con la certeza de haber cumplido el objetivo, pero con reservas con la CDT, al no haber podido o no haber visto voluntad de tener un contacto más serio.

Cinco días más tarde nos llegó la grata noticia de que, después de 60 días de huelga, los compañeros de Roca Maroc regresaron al trabajo tras conseguir  lo que desde el pasado mes de mayo llevaban exigiendo: poder organizarse dentro de la fábrica, creando una sección sindical que les servirá de herramienta para mejorar sus condiciones de trabajo. La condición puesta por la empresa era que el compañero Nachit no volviera a Roca; el compañero Nachit lo aceptó y pidió a la asamblea que también lo hiciera, diciendo que era mucho más importante lo que se conseguía y que él siempre estaría con ellos en las futuras luchas. Su despido no tuvo más indemnización que el que le correspondía. 

En los días siguientes la multinacional Roca se comprometió tanto con los trabajadores como con representantes del Gobierno Marroquí, a respetar sus derechos sindicales, la empresa les proporcionó un local sindical y tablones de anuncios para informar y comunicarse con los trabajadores, y organizaron elecciones sindicales. Su objetivo más inmediato, tras obtener la totalidad de los siete representantes, es tener un convenio propio para mejorar sus condiciones económicas y de trabajo y regular todos los aspectos de la rutina laboral.

El pasado mes de Mayo nos informaron que tras semanas de negociación consiguieron un acuerdo de subida salarial de un 12% para este año y el siguiente 2013, además de mejoras sustanciales en salud laboral y un protocolo de seguridad. Esto significa un salto cualitativo importantísimo, no solo para ellos sino para todo el tejido industrial de la zona.

Los compañeros están muy satisfechos y CGT de Roca también. Teniendo en cuenta que jamás han tenido experiencia alguna en el terreno de la lucha y sus métodos, han dado un ejemplo de fuerza y unidad, que les ha servido para alcanzar su objetivo y para aprender de una experiencia que no hace mucho tiempo jamás hubieran pensado llevar a cabo. Pero tanto ellos como nosotros sabemos que esto es el comienzo de una larga lucha que les lleve más lejos en su exigencia de mejoras, y no dudarán en plantear una huelga como la anterior si Roca incumple lo acordado o no mejora sus condiciones. Con la diferencia de que esta vez contaran con la experiencia y el aprendizaje de métodos organizativos.

Evidentemente el trabajo internacional que en su día comenzamos con CGT Internacional continua: hay que concretar más los acuerdo de colaboración con la CDT y reafirmar con los compañeros de Roca Maroc, una vez consolidada la sección sindical, el plan de trabajo internacional, tomar contacto con los compañeros de Roca Egipto y trabajar en la creación de un Comité  Internacional de trabajadores de Roca. Pedimos formalmente reuniones con CDT Settat y CDT-Roca Maroc para tratar estos temas. La respuesta a día de hoy es afirmativa por ambas partes, añadiendo CDT-Roca su deseo de seguir trabajando siempre unidos. Ahora estamos pendientes de concretar la fecha del viaje, que sin duda será clarificador con la CDT y muy positivo con los compañeros de CDT-Roca Maroc.

Nos queda el trabajo más duro, lamentablemente mucho más que el que hemos realizado a más de 2.000 kilómetros, y no es otro que explicar pacientemente en las fábricas de Roca del estado español qué es y significa una colaboración con trabajadores de otros países del grupo. Daría para otro artículo el poder explicar todos los prejuicios con los que nos hemos encontrado, y lo complicado que es combatirlos. Pero estamos seguros que lo hecho es la mejor vía para poder romper con toda la propaganda del capital entre los trabajadores y penetrar en las conciencias que diariamente están bombardeadas con los pensamientos y carga ideológica de la burguesía y sus medios de manipulación, contra trabajadores de otros países o culturas.